Este 9 de agosto se conmemoró los 22 años de la partida de Ramón Valdez; cientos de grupos conformados por jóvenes y adultos son sus seguidores; no pueden olvidar las ocurrencias, las tantas carcajadas que sacó y seguirá sacando a las miles de personas que todavía continuarán viéndolo por televisión.
Pero qué hay detrás de la imagen de este personaje cómico latente en las mentes de toda esta gente, que desde muy niños seguramente ya lo admiraban y que aún lo tendrán por mucho tiempo gracias a los varios canales no sólo de Latinoamérica sino del mundo entero que transmiten las series de todo el clan ‘Chespirito’, pues han sido dobladas a un aproximado de 40 idiomas. ‘El Chavo’ es la prominente.
No es casualidad que este gran personaje se haya inmiscuido en el mundo de la actuación. Si su vida fue de película, en su familia fue el cuarto de nueve hermanos, de donde cuatro, incluido Ramón se dedicaron a la dramatización cineasta.
Todos ellos desde chicos ya tenían sobrenombres: Germán Valdez "Tin Tan" (quien llevó a Ramón a la actuación), Manuel "El Loco" Valdez, Antonio "El Ratón” Valdez", y Ramón “Moncho” Valdez, que justamente es como sería conocido en la serie de la Vecindad del Chavo. Cabe mencionar que Cristian Castro es sobrino de Ramón Valdez, hijo de su hermano Manuel.
Sus padres, Rafael Valdez de descendencia italiana y Guadalupe Castillo, con raíces mexicanas, fueron los impulsores para que sus hijos se adentren en el arte del cine. Ramón tuvo tres esposas y se especula que procreó al menos diez hijos. Por lo general, le gustaba la soledad, era de carácter fuerte y poco salía en programas televisivos donde era invitado.
Aunque fue nacido en el DF mexicano el 2 de septiembre de 1923, vivió buena parte de su niñez y adolescencia en la Ciudad de Juárez; regresó a la capital por su carrera de actor.
Una de sus características de su personaje en El Chavo del 8, fue que tal cual aparecía en los capítulos, o sea en su vestimenta y comportamiento, era como normalmente solía estar en el cotidiano vivir; y paradójicamente, con Quico (Carlos Villagrán), mantenía una estrecha amistad, algo que el show mostraba lo contrario.
“El personaje era propio de él; Roberto (Chavo del 8), le decía sé tú mismo”, comentaba Rubén Aguirre (Profesor Jirafales). Esto logró que se desentrañe y se encarne con una naturalidad excepcional en la interpretación de Don Ramón.
A sus 27 años empezó su carrera; grabó alrededor de cincuenta películas consideradas dentro del auge de la producción cinematográfica de México (décadas 50 y 60), entre las que se encuentran: Tres mosqueteros y medio, Las mil y una noches, entre otras.
No obstante, en 1968 forma parte del elenco de Chespirito y en 1971 de la Vecindad del Chavo, donde realmente alcanzó mayor protagonismo y prestigio.
En 1979 decidió separarse del equipo de Chespirito para realizar otras producciones con Carlos Villagrán, las mismas no tuvieron gran acogida y por ende provocó su regreso escasos años después. Grabó unos pocos nuevos capítulos y luego recorrió muchas ciudades de México con su circo; además, hizo otros shows en algunas capitales latinoamericanas. Lima fue la última ciudad donde actuó.
Para Roberto Gómez Bolaños y Carlos Villagrán el programa sin Don Ramón ya no tenía sentido; “doña Florinda no tenía a quién pegar, el Chavo no tenía protección, la Chilindrina se quedó huérfana, la Bruja del 71 su motivo era don Ramón, el único que no pagaba la renta era don Ramón; era el eje del programa”, expresó ‘Quico’ en una entrevista a Panamericana TV.
A decir de María Antonieta de las Nieves, la Chilindrina, Valdez “era tan chistoso al momento de hacer sus escenas que teníamos que aguantarnos la risa, si no se caía el show”, recuerda muy contenta.
A los 64 años, un 9 de agosto de 1988 falleció con cáncer al pulmón; producido, según sus médicos, por exceso de cigarrillo que le venía afectando años atrás; sin embargo, él continuó cantándole a la vida hasta sus últimos días.
Redacción: Eddy Salinas Alba
